El seguro de coches frente a los coches autónomos

coches autónomos

Los coches autónomos ofrecen la promesa de que, en 20 años, viviremos en un mundo en el que los coches se conducirán solos. Podremos ir hasta una estación de servicio mientras dormimos o en el que podremos estar usando el móvil sin que esto conlleve un siniestro total. La era de los coches autónomos se acerca. Y si bien no todos los vehículos en carretera circularán sin conductor, se espera que alrededor de un tercio sí que lo haga.

Aunque es un escenario del que toda aseguradora ha oído y teme, no es en el que las compañías de seguro de coche deberían centrarse por el momento, señala la correduría de seguros Unipoliza. En su lugar, deberían concentrarse en la inteligencia artificial que se está haciendo camino en las carreteras. Mucho antes de que los coches autónomos lleguen a tener un impacto significante, los Sistemas Avanzados de Asistencia a la Conducción (ADAS) están a punto de cambiar los modelos de gestión de accidentes y reclamaciones de la industria.

Los coches autónomos completamente funcionales aún tardarán en llegar

Las aseguradoras ya están empezando a vislumbrar lo diferente que será el mundo de la conducción en los próximos 15 o 20 años. Es un futuro poblado por toda especie de vehículos. Desde coches y conductores tradicionales, hasta aquellos con sistemas parciales de conducción automática, con incluso algunos coches experimentales totalmente autónomos.

En 2025, se espera que el porcentaje de coches en carretera con Sistemas Avanzados de Asistencia a la Conducción pase a cerca de un 40%. Considerando que en 2015 este porcentaje era de un 10%, es un gran crecimiento.

La tecnología está redefiniendo la forma en la que usamos los coches – y ahora también influencia en la manera en que funcionan los seguros de coche. Unipoliza.com advierte que, mientras la proporción de coches parcial y totalmente autónomos que comparten carretera con coches tradicionales aumenta, se acerca un periodo de incertidumbre para las aseguradoras a la hora de gestionar las reclamaciones.